Caravaggio es uno de mis pintores favoritos de todos los tiempos. Esta obra en particular me fascina, creo que mucho tiene que ver la historia de David y Goliath. Lo que más me gusta es que esta llena de lecturas en segundo término. La pintura por si misma, técnicamente hablando es impecable, hermosa. Cuando sabes quienes son, te interesa aún más. Es una pintura que te dice lo que pasó antes, lo que sucede en ese momento y un poco de lo que podría pasar adelante. Se presume que Caravaggio se retrató a sí mismo como Goliath, situación que me parece interesante, porque él siempre pensó que moriría decapitado. Curiosa la forma de pensar de este sujeto, que tuvo una vida llena de complicaciones. Yo siempre he respetado la pintura y la animación. Son artes que crean mundos a partir de nada, de un lienzo en blanco, literalmente. Si me pregunta alguien que qué prefiero entre fotografía y pintura, sin pensarlo opto por la pintura. Una fotografía, hoy más que nunca, la puede tomar cualquier persona con un celular. Una pintura de esta calidad no cualquiera. Se puede argumentar al respecto, pero en su más puro estado, crear algo de cero siempre será más difícil que algo que ya está ahi.
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